¿Te ha pasado que le compras un regalo a tu hijo y en vez de ponerse feliz, lo toma como si fuera una obligación tuya el comprarle lo que pida y continúa pidiendo más sin dar las gracias por lo que tiene ?
Te propongo poner en práctica estos 4 consejos
Redirige la conducta negativa
Enséñales a ser agradecidos en lugar de que crean que se merecen todo. Puedes decir suavemente un ejemplo claro y directo: “Yo espero que cuando te compro un dulce, incluso si no es exactamente el que querías, me digas gracias”
Háblale de las cosas por las que hay que dar gracias
Olvídate del sermón donde les dices que no valoran lo que tienen…. mejor concéntrate en llegarles de forma indirecta y con un ejemplo que puedan observar: ejemplo: le di una moneda al hombre vagabundo para que pueda comer algo hijo, me siento muy agradecido de que podamos tener una casa donde llegar a dormir.
Vuélvete un ejemplo todos los días
En casa agradece siempre a quien prepare algo de comer, saque la basura, te ayude con un mandado o por hacer algo que realmente no querías hacer.
No cedas ante las compras innecesarias para tu hijo o para ti
Se fuerte y no es necesario cumplirle siempre su antojo o capricho. pero aguas, tu hijo también te observa cuando tu corres a comprar lo último de la moda aunque te endeudes.
Estos consejos te ayudaran a crear un ambiente sano y agradable para que todos en familia aprecien lo que tienen.
