Pensar en el futuro de tu hijo seguramente hace volar tu imaginación pensando en todo el potencial con el que cuenta y las infinitas posibilidades que tiene para triunfar en lo que desee.
Está en tus manos inculcarle una de las herramientas más poderosas para que su futuro sea brillante, habló de la disciplina.
La disciplina inicia en casa, en las pequeñas acciones que realiza tu hijo desde pequeño, es enseñarles a hacer a un lado sus deseos para que puedan cumplir con sus obligaciones, recuerda que la disciplina no es sinónimo de regaño o castigo, sino que se trata de establecer expectativas, límites y fomentar la responsabilidad personal en ellos.
Puedes asignarle responsabilidades de acuerdo a su edad y conforme vayan creciendo puedes ir incrementando estás, así le demostraras que confías en él Te sugiero llevar a la práctica algunas de estas actividades, que son sencillas y se pueden realizar diariamente.
- Tender la cama o ayudarte a hacerlo en la medida de sus habilidades motrices
- Seguir un horario diario de actividades
- Colocar la ropa sucia en el cesto
- Limpiar la mesa
- Alimentar a una mascota
- Preparar un día antes su uniforme
- Guardar sus juguetes
- Ayudar en lavar las verduras o frutas
Puedes explicarle a tu hijo que la disciplina es: hacer cosas que quizá no tengan ganas de realizar en ese momento, como la tarea, pero al hacerla diario con concentración, obtendrá un buen resultado al final del mes.
Recuerda darles motivación positiva para que se entusiasmen al realizar sus quehaceres o las actividades que le asignaste, por ejemplo, puedes desafiar a tu hijo a recoger la ropa sucia en el menor tiempo posible o hacer un concurso con sus hermanos para saber quién recoge los juguetes rápidamente.
Es importante también que motives con gestos o palabras dulces que le transmita que estás orgulloso de él, puedes decirle “buen trabajo”, “con tu ayuda fue más fácil”, “gracias por ayudarme”, “Vas muy bien” , “Te estás esforzando mucho y te lo agradezco” etc.
La disciplina va de la mano del auto control y es una cualidad que se puede construir con el paso de tiempo. Pon manos a la obra, ya que está comprobado que quienes la practican obtienen los resultados esperados.