Hacer regalos a nuestros hijos es algo que como padres nos gusta mucho, porque disfrutamos al verlos felices, pero es una realidad que ahora los niños tienen más juguetes de los que necesitan y en muchas ocasiones seguramente has sentido que no valoran sus posesiones y juguetes porque los descuidan, rompen o pierden partes de ellos.
Existen varias razones por las cuales puede estar sucediendo:
- niños activos: cuentan con mucha energía y los destrozos no son intencionales, pero hay que ponerle un freno o canalizar esa cantidad de fuerza e impulsos.
- niños curiosos: les encanta saber cómo funcionan las cosas y de qué están hechas, no pretenden romperlos pero al examinarlos ya no saben cómo volver a armarlos.
- niños emocionales: cuando no pueden realizar con exactitud la actividad que desean con su juguete o posesión, se desesperan y los avientan, esto es, porque no han aprendido todavía a expresar su emoción de manera adecuada.
- niños que no saben apreciar: acostumbrados al usar y tirar, normalmente sucede cuando tienen tantas cosas a su alcance que ya no se dan cuenta de su valor porque pueden conseguir un juguete o artículo nuevo fácilmente.
- niños vengativos: cuando hacen notar su disgusto ante un regaño destruyendo juguetes o dañando objetos de la casa.
¿Qué puedes hacer para dar solución a estos comportamientos?
a) sin importar el número de juguetes que tenga tu hijo, ve reciclándolos y dale cierto numero de juguetes a la vez y los valorará más.
b) al momento de comprar un juguete nuevo, analiza si tiene potencial para usarse más de una sola vez o cuenta con muchas piezas pequeñas fáciles de perder.
c) al abrir juguetes nuevos, dedica tiempo a enseñarle cómo se arma y cómo se guarda para que no se estropeen ya que si los van guardando sin piezas van perdiendo el interés por usarlos.
d) recompénsalo por haber sido cuidadoso, con un simple comentario positivo es suficiente.
e) si le gusta conocer el funcionamiento de las cosas, ofrécele juguetes viejos o aparatos sencillos para que los pueda armar y desarmar sin representar un peligro para el.
f) si rompe cosas por enfado, enséñale a identificar las emociones y cómo reaccionar ante cada una, te recomiendo recrear situaciones con juegos de roles para explicarle con tu ejemplo cuales son las expresiones y acciones adecuadas para cada situación.
g) si ha destruido un juguete y tiene arreglo, enséñale cómo se repara con pegamento o cinta y hazle “ganarse” su próximo juguete realizando tareas de casa.